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30 ago 2016

Credibilidad

La definición de corrupción que da la Real Academia Española (RAE) es: En las organizaciones, especialmente en las públicas, práctica consistente en la utilización de las funciones y medios de aquellas en provecho, económico o de otra índole, de sus gestores.
La RAE no es una Academia que dice qué significan las palabras sino una Academia que recoge la información de los usuarios del idioma ¡que somos los ciudadanos! Por tanto, somos los ciudadanos los que decimos qué significan las palabras que nosotros mismos utilizamos.
Pero los representantes del PP y de C’s han decidido que los ciudadanos no sabemos que es corrupción. Ellos han decidido que son ellos los que deciden qué es la corrupción. Pero los ciudadanos opinamos que cuando quien recibe un “provecho de otra índole” es un corrupto aunque el acuerdo del PP y de C’s digan que esos corruptos no son corruptos.
Su definición recuerda el libro de Orwell “Rebelión en la Granja”. Resumamos el texto del libro: Los animales de la Granja Manor tras una revolución expulsan al granjero/dictador Sr. Jones y crear su propia constitución: 1.-Todo lo que camina sobre dos pies es un enemigo. 2.-Todo lo que camina sobre cuatro patas, o tenga alas, es amigo. 3.-Ningún animal usará ropa. 4.- Ningún animal dormirá en una cama. 5.- Ningún animal beberá alcohol. 6.-Ningún animal matará a otro animal. 7.-Todos los animales son iguales
La granja pasa a llamarse Granja Animal y es más próspera que bajo la dictadura el Sr. Jones. Al cabo de cierto tiempo los cerdos se habían autoerigido líderes por ser más inteligentes empiezan a ser corruptos abusando de su poder y manipulando los mandamientos a su favor. Dos cerdos, Bola de Nieve y Napoleón, empiezan a tener posturas distintas entonces Napoleón azuza a los mastines y Bola de Nieve escapa de la granja para evitar que lo asesinen.
Tras ello Napoleón se autoerige único líder y sus congéneres, los demás cerdos se convierten en una élite mientras que los demás animales viven atemorizados por los perros al servicio de Napoleón. Los cerdos corruptos acaban repitiendo el comportamiento del Sr. Jones. En relación con los Siete Mandamientos proceden a su corrupción lingüística modificando su texto: 1.- Ningún animal dormirá en una cama con sábanas; 2: Ningún animal beberá alcohol en exceso; 3.- Ningún animal matará a otro animal sin motivo y así poco a poco con todos. En esta corrupción de significados cuenta con la complicidad de los demás cerdos corruptos.
Tras esa corrupción lingüística los cerdos cambian su comportamiento: se visten con las ropas del Sr. Jones y aprenden a andar sobre sus patas traseras previa modificación del primer mandamiento, y a mantener buenas relaciones con los granjeros vecinos que felicitan al corrupto Napoleón por el éxito económico de la granja: aumentan la jornada laboral, reducen el salario (la alimentación), prohíben las quejas y así aumentan la productividad. Napoleón y los cerdos los invitan a almorzar en la granja y entonces los animales descubren que sus compañeros cerdos se parecen a los hombres no sólo en su conducta sino también en su aspecto.
La dictadura de los corruptos, Napoleón y sus cerdos se consagra más y más. Cuando los animales le preguntan al burro Benjamín, que es uno de los pocos que sabe leer qué dice el único mandamiento que aún no se ha tachado lee: Todos los animales son iguales ante la ley, pero algunos animales son más iguales que otros.
PP y C’s han corrompido el significado de corrupción. Donde antes decía: “Todos los ciudadanos corruptos serán juzgados igualmente por la ley” ahora dice “Todos los ciudadanos corruptos serán iguales ante la ley pero algunos corruptos son más iguales que otros”.
La pregunta que provocó la derrota de Nixon ante Kennedy fue “le compraría un coche usado a Nixon”. Si alguien del PP, el Sr. Rajoy, la Sra. Cospedal, la Sra. Barberá, el Alcalde de la Val d’Uxo y otros “NO” corruptos le vendieran un coche usado ¿se lo compraría Vd. aunque lo pudiera pagar “en diferido”?

Pero la pregunta definitiva es: si el Sr. Rajoy u otro miembro del PP firmara un pacto con el PSOE para cumplirían el programa socialista todos los votantes del PP seguirían votando al Sr. Rajoy pero ninguno de los votantes del PSOE lo haría. Los votantes del PP les votarían porque saben que no cumpliría el pacto y por esa misma razón los votantes del PSOE nunca lo votarían. A esa coincidencia en la opinión se le llama falta de credibilidad. No es pues el programa, son las personas que han perdido toda su credibilidad así lo juren sobre la misma Vera Cruz.

27 ago 2016

El problema es el PP

Mi desacuerdo con el análisis del Prof. Jorge de Esteban (EL MUNDO 23.08.2016) es total. Empieza con la referencia a lo dicho por el Presidente, Lic. Suárez, cuando dimitió. No hay ningún parecido entre ambos Presidentes. Lic Suárez y Lic. Rajoy: uno era un político y otro “un registrador de la propiedad” dicho sea con todo respeto para estos profesionales que han acreditado su competencia para ejercer su profesión.
La segunda se refiere al texto de la dimisión. Le honra cuando dice: “He llegado al convencimiento de que hoy, en las actuales circunstancias, mi marcha es más beneficiosa para España que mi permanencia en la Presidencia”. Pero menos cuando dijo: ““Algo muy importante tiene que cambiar en nuestras actitudes y comportamientos. Y yo quiero contribuir con mi renuncia, a que este cambio sea realmente posible e inmediato. Debemos hacer todo lo necesario para que se recobre la confianza, para que se disipen los descontentos y los desencantados. Y para ello es preciso convocar al país a un gran esfuerzo. Es necesario que el pueblo español se agrupe entorno a las ideas básicas, a las instituciones y las personas promovidas democráticamente a la dirección de los asuntos públicos”.
Desde la Presidencia del Gobierno debió atreverse a hacer lo que no hizo. El país hubiera estado con él. Y aunque no se hubiera atrevido lo que ocurrió después del Golpe de Estado hubiera sido otra cosa. Él era un político de raza y hubiera sabido hacerlo en lugar del fraude que se montó para ¿escondernos qué?
Su disculpa de que no quería que “el sistema democrático de convivencia fuese, una vez más, un paréntesis en la Historia de España” es parte del engaño que se mantiene: “esto” no es un sistema democrático; es una dictadura monárquica hereditaria de carácter parlamentario que merece, de momento, el nombre de “dictablanda” en relación con la dictadura monárquico-militar no hereditaria (el dictador era un Jefe del Estado al que tampoco eligió nadie y era militar aunque no decidió hacerla hereditaria, que también era parlamentaria.
Resulta comido leer que hay que agradecer el fracaso del golpe militar, ¡aunque sea paradójicamente” “al teniente coronel Tejero, quien, con su brusquedad militar en el Congreso, lo neutralizó, no dejando entrar al general Armada” no deja de ser una curiosa versión imaginativa. El blog del Sr. Anasagasti recoge una versión digna de toda veracidad del Sr. Fernández Campos interesadamente ocultadas a todos los españoles que nunca sabrán - hay grabaciones telefónicas que han “desaparecido” - a ciencia cierta lo que pasó. Pero lo “sabemos”.
La actual situación no se parece ¡en nada! Preside el gobierno en funciones un político torpe, por ser generosos en la calificación pues merece muchas otras. Es la parodia más ridícula y tópica del gallego de los chistes que en nada se parece al gallego leal y decente que hay en Galicia:
1.- Él se encogió como un conejo en diciembre. La hipótesis “Valor: se le supone” no la acreditó cuando debía.
2.- Él provocó la actual inestabilidad al no abstenerse, sabiendo el perjuicio; ¡y ahora exige la abstención a otros!
3.- Él es un presunto delincuente: se negó a la petición del Congreso para explicarse ante “los representantes del pueblo soberano” (art 1.2, CE78). Esto ha motivado una querella que está en trámite en el TS..
4.- Él nos desprecia cuando tras miles de imputados por saqueo a las arcas del Estado miembros de su partido pacta con C’s una nueva definición de corrupción para que ningún corrupto pueda ser denominado corrupto.
5.- Él pretende desincentivar la participación del PUEBLO SOBERANO colocando las elecciones en Navidad. No le interesa que el pueblo de su opinión: sólo le importa es manipularla con las fechas porque cree que así gana
La afirmación del autor de “tener que definir a nuestro régimen político como una tontocracia” no es todo mérito suyo. Personas ilustres acreditan esa calificación con su comportamiento desde hace mucho.
Las tres opciones que señala el autor del trabajo está en la línea del lavado de opinión que llevamos sufriendo meses: que la primera, nuevo gobierno del Lic. Rajoy, es felizmente improbable, que el Tamayazo puede repetirse. En tal caso, como dice el autor, sobre él planearía “la moción de censura, regulada en el artículo 113 CE”, algo que era “una posibilidad utópica” en gobiernos mayoritarios, pero que Portugal nos ha recordado que es una real realidad parlamentaria, al menos en un república democrática.
La segunda de la participación de Ciudadanos es improbable; nacieron para lo que nacieron y desaparecerán como le paso a UCD cuando pactó con el PP en la alcaldía de Madrid.
La tercera, se califica de “vorágine de unas nuevas elecciones para que todo siga igual” como lavado de cerebro al que se nos somete: ninguna elección es una “vorágine” sino algo legal y ordenado; además nadie puede acreditar que el resultado sea “igual” y por último, que es lo primero cabe la opción de otro candidato a Presidente del Gobierno.
Atribuye el autor al Diputado Dr. Sánchez el temor a una erisipela si aceptara formar gobierno con el Presidente Lic. Rajoy, oferta que nunca se produjo. Su temor es a un contagio de una enfermedad socialmente más rechazada frente a la que no existe otro cordón sanitario que “el no, es no”.
Destacar el “enorme mérito de Albert Rivera, que es un futuro presidenciable de España cuando madure algo más” es cómico. Las líneas rojas de la formación naranja están todas desteñidas en azul. Que haya  otro candidato del PP es imposible ¡Rajoy no lo permite! Además el problema no es el Lic. Rajoy; lo es el PP.
La última comparación con la actitud deportiva del Sr. Nadal es una afrenta que éste no se merece.

NUNCA el Diputado Lic. Rajoy jugó limpiamente en política. El mismo lo confesó en diciembre: no me presentó porque sé que no tengo los votos para ganar.  El Diputado Dr. Sánchez fue más deportivo: tampoco los tenía pero jugo para ver si conseguía ganar. ¡Limpiamente!, ¡Sin marrullerías! ¡Sin convocar en Navidad!

20 ago 2016

Mi cuerpo es mio

Aceptamos lo abusos porque venimos de una situación de abuso. “Toda la vida ha sido así” no es un argumento más que para cambiar lo que “nunca debió de ser así”sino para urgir su cambio.
Leo el auto de TSJCV sobre las prácticas universitarias en hospitales públicos que suspende cautelarmente, la decisión de la Consellería de Sanidad que limitaba la realización de prácticas universitarias de estudiantes de Ciencias de Salud en la Universidad Católica de Valencia en hospitales públicos.
La cuestión esencial que se plantea con este conflicto tiene múltiples aspectos.
El primero es que lo más congruente con una universidad privada y el espíritu que la ha engendrado es establecer conciertos con centros de salud privados. Los alumnos que estudian en esa universidad harán sus prácticas tan privadamente como hicieron sus estudios en ella.
El segundo, es que ningún estudiante, aunque su universidad sea pública tiene derecho a disponer del cuerpo de un ciudadano enfermo para hacer prácticas como si fuera una cobaya. Todos pagamos con nuestros ingresos e impuestos el derecho a una atención médica pública que no condiciona su prestación al secuestro del cuerpo para entrenamiento de nadie. La sanidad pública no son los hospitales de beneficencia del S: XIX. Allí los ciudadanos enfermos eran atendidos y pagaban la atención en especies. Con su cuerpo aprendían los médicos.
Es claro que los médicos necesitan adquirir experiencia para ejercer su profesión. “Su necesidad” no les autoriza a “secuestrar” nuestro cuerpo, ¡ni aún si se comprometieran a prestar luego sus servicios en un centro público durante un determinado número de años!
Eso se exige ahora a los militares que logran su título de piloto tras formase con cargo a los presupuestos del Estado. Se acabó el abuso de lograr el título e irse a una empresa privada para forrarse. Quien estudia en una escuela privada lo hace con aviones privados y ejerce la profesión en empresas privadas cobrando sueldos privados.
 La máxima desfachatez es en las operaciones. ¿Le opera el médico que le dicen? Nunca lo sabrá. Quizá fue un estudiante “haciendo manos”. Hoy se graban los juicios para garantía del enjuiciado deberían grabarse las operaciones para garantía del operado. ¿Quiénes se oponen.
Se justifica el secuestro diciendo: “es un hospital universitario”. Qué beneficio obtengo? ¡Ninguno! Los hay muy sucios y muy corruptos donde se “hacen negocios” con mis datos. En todos mii cuerpo es el de una cobaya para que se entrene alguien que cuando sea médico privado me cobrará por sus servicios ¡lo que quiera!  tras haberse entrenado gratis a mi costa.
Si uno va al médico y lo recibe acompañado de uno o dos estudiantes de su especialidad la más mínima norma de educación exigiría que el médico se los presentara. Si eso no se lo enseñaron en su casa debió aprenderlo en la escuela o, al menos, en la facultad de medicina ¿O eso no se enseña? “permítame presentarle a estos dos médicos que está haciendo aquí su tal año de especialidad”. La privacidad de la medicina no admite la presencia de desconocidos.
Luego procedería pedir su autorización: “¿permite Vd. que asistan a la visita que Vd. me hacer? ¿permite Vd. que exploren su cuerpo en relación con los síntomas que Vd. tiene bajo mi supervisión, exploración que sería la que yo llevaría a cabo”. La inmensa mayoría aceptará esa petición; pero si se niegan esas personas deberían de salir en ese momento. ¡Es su derecho!
¿Algún médico tuvo con Vd. este trato que exige la buena educación? Raramente. Ellos son los primeros que consideran que Vd. es de “su propiedad”. Muy pocos tienen la conciencia clara de que son “sus empleados” y que su sueldo procede de su bolsillo, vía impuestos.

El secuestro del cuerpo del ciudadano es una forma de corrupción pública  impuesta.

16 ago 2016

Catch as can catch

                En casi todas las televisiones hay programas de debate político que producen vergüenza. El espectáculo que organizan los “contertulios”, en general encantados de haberse conocido, no es fruto de la incompetencia de quien los dirige, creo yo, porque jamás lo hace; el montaje parece una premeditada organización de enfrentamiento verbal en plan “catch as can catch”, es decir, agárralo por donde puedas, el vulgarmente llamado “cachascán” que es el nivel más bajo del pugilismo, donde no hay reglas de ningún tipo y cualquier deslealtad está permitido.
Estos programas han alcanzado el nivel intelectualmente y en muchos casos consiguen superarlo de esos programas de la llamada “televisión basura” donde se discuten asuntos de intimidad normalmente sexual y en los que salvo llegar a las manos, las denominadas despectivamente “discusiones de verduleras” parecen a su lado debates versallescos.
Lo característico de una discusión entre personas bien educadas, no digamos si además son medianamente cultas y no del todo irrazonables, consiste en lo que la RAE define como discusión: la exposición alternada de razones en favor de una determinada postura u opinión. Ninguno de estos debates respeta la alternancia. Los contertulios, unos con más frecuencia que otros, interrumpen a gritos a los que estaban hablando. El director del programa, que no dirige el debate, lo contempla encantado de la vida con la bronca fomentándolo con su inacción.
Tanta exhibición de grosería española debería evitarse. Ésa es la “marca España”. Si una persona habla interrumpirla es una grosería ¡incluso en esta tierra de garbanzos! Para ello propongo a esos programas que incorporen la contabilidad de los locutores de futbol que con gran rigor contabilizan corners, faltas, asistencias, y un sinfín de incidentes menores del partido, tiempo de posesión del balón, tiempo en que está en campo propio o ajeno, o en el entorno de la portería, tiros a puerta distinguiendo los desviados de los que dan en los palos, etc., etc.
Un sistema automático de contabilidad que todos vieran en directo bastaría para avergonzarlos y desalentarles en su comportamiento, aunque más de uno fuera “inasequible al desaliento”. En ella aparecerían las interrupciones al que estaba hablando. Ese tiempo robado penalizaría al que interrumpió. Ese tiempo, por ser robado, se penalizaría al doble si el contertulio atropellado se calla ante la grosería de que es objeto evitando el espectáculo de dos “seres” desgañitándose a gritos para callar al otro. La víctima vería premiada su educación penalizando al doble al grosero que no quiere ser su interlocutor sino el que le impide hablar.
Ya que ni en su casa ni en la escuela ni en su profesión han aprendido a portarse como gente bien educada estos programas de televisión serían su cuarta oportunidad, con lo que ellos serían los primeros beneficiarios; el espectáculo de estas contabilidades resultaría también educativo para los televidentes que están quejados de igual comportamiento, que podrían escarmentar en cabeza ajena, pero sobre todo ganaría la imagen general de los españoles que deja estupefactos a los extranjeros que contemplan esos programas.
En el viejo programa de “La clave” que dirigía Balbín los sábados se proyectaba una película cuyo su argumento centraba el tema del debate. Se solía invitado a algún extranjero experto en el tema al que Balbín informaba: “puede Vd. interrumpir en la discusión a los demás miembros del panel de debate”. Jamás ninguno interrumpió a nadie; eso no frenó a los españoles más groseros que no dudaban en interrumpir al invitado: él se callaba en el acto y no volvía a hablar hasta que Balbín, avergonzado ante su silencio, le daba la palabra expresamente.

Cuando se está bien educado ya es imposible ser grosero.

12 ago 2016

La corrupción

Aunque siempre veo el vaso medio lleno, el artículo “La corrupción” del Sr. Trillo, ex presidente de la Sala Tercera del Tribunal supremo publicado en ABC el 09.08.2016, también optimista, incurre en un error experimental. Lamenta él la sensación de corrupción que invade a todos los ciudadanos del país. No cabe otra. Responde a la realidad. Desde los niveles más altos del Estado se ha practicado siempre con total impunidad; mayor aún que en los municipios más pequeño.
Es inútil negar que “la corrupción es una niebla espesa que ciega su sana viabilidad [la del sistema] porque ha quedado definitivamente incrustada en él, hasta el punto de que ha llegado a definirlo”. Aunque hay políticos que no son corruptos eso no permite; esa excepción de corrupción debería producir rechazo, porque debería ser la norma. El punto cero de la actuación  de un político es su comportamiento ético. Un solo corrupto debería escandalizarnos. Pero la corrupción ha cambiado el marco exigencia porque se han instalado tanto en el sistema que hasta los no corruptos dice: ¡No todos somos corruptos! Cuando ellos deberían decir ¡No toleraremos ni un solo corrupto!, en lugar de protegerlos hasta que el juez ya no selo permite.
Entonces salen con lo de la “presunción de inocencia” habiendo “sospecha de culpabilidad”.
Es lamentable que el Sr. Trillo desprecie a “esas entidades anglosajonas que viven de observar aconteceres ajenos y valorarlos según su vara de medir, hablen de que la corrupción es sistémica en España”. Por su trabajo de investigación sobre la corrupción deberíamos estar agradecidos. Aquí no lo hace nadie. ¿Cómo puede reprocharles que vivan de su trabajo? Sólo los corruptos no viven de su trabajo sino de sus corrupciones y sólo ellos merecen el reproche por esa vida.  Además, lo verdaderamente importante es que: mida quien mida la corrupción que hay es un hecho que existe. Con esa o con otra vara de medir nada de lo que denuncian es falso,
Por otra parte la referencia a los comentarios de Ortega sobre Mirabeau están también fuera de lugar. Su interpretación de la vida de Mirabeau es erróne. Su vida privada delictiva sufrió sanción públicas; su vida pública merece elogios. Ojalá fuera seguida por los políticos españoles. Los corruptos políticos españoles no siguieron el ejemplo de Mirabeau: prefirieron ser corruptos.
Y también es falso “que el sistema constitucional español, en apreciación conjunta de la prueba … merece una admiración no menor que la que ofreció Ortega a la visión política de Mirabeau”. El sistema “bajo el que sobrevivimos” - ¡pregunten a los 20 millones de parados hijos de la corrupción! - será parlamentario - el de Franco también lo era- pero nunca será democrático. No lo es ninguna monarquía. Ésta, además ha nacido de la voluntad de un dictador al que padre e hijo han alabado con interesada e inolvidable servilidad; y eso también es corrupción.
Al Jefe del Estado en España no se le elige, como en una democracia: lo nombró un dictador; tampoco somos iguales ante la ley: una familia tiene privilegios desde la cuna hasta más allá de la muerte: ¡los heredan! Comparar al autor del “Ensayo sobre el despotismo” con el sistema heredero del franquismo afrenta a Mirabeau. Los más famosos textos de Franco fueron condenas de muerte con que “legalizó” sus asesinatos y la ley donde hizo al rey su heredero.
Que el Sr. Trillo pretenda disimular la realidad corrupta del sistema alegando que en los USA valoran “ferozmente independiente” al poder judicial no convierte en jardín el lodazal político en el que vivimos. En cualquier lodazal florece la rosa. Pero lo que ya es excesivo es afirmar que “iluminan en la cúspide”. Eso exigiría olvidar algunas sentencias terriblemente politizadas y por ello inolvidables: el apoyo a la corrupta aplicación de la doctrina Parot para perjudicar a un etarra juzgado con las leyes franquista; el apoyo a las cláusulas suelo con el que se consagró la estafa a millones de honrados trabajadores y tantas otras que el TJUE ha revocado ¡y las que revocará!
Por todo ello y más es total nuestro desacuerdo con la conclusión “el tema de la corrupción de ningún modo debe sentirse como definitivamente lesivo para la calidad sustancial del sistema” porque no es sólo “una incidencia grave, muy grave, un reto, si así se quiere, pero ante el que el propio sistema se engrandece y fortalece al contestarlo con el poder del Derecho”. El “sistema político está corrupto” y de él nace la corrupción que procura la impotencia del poder judicial.

Los lectores de ABC estarán contentos con el artículo del Sr.Trillo; yo espero que mis lectores estén contentos con el mío

7 ago 2016

No buscan la concordia

Bajo el título “18de julio: huir de la discordia” leo en el ABC un artículo que dice: ”La falsificación deliberada y sistemática de nuestra Historia contemporánea, llevada a cabo con programada inverecundia por algunos de los sucesores de quienes perdieron la guerra civil y sin réplica apreciable por parte de los herederos políticos de los vencedores, está deformando de manera inquietante la mentalidad de los jóvenes españoles que, sin formación ni conciencia crítica ninguna, aceptan con la mayor naturalidad la beatificación de las figuras históricas de la izquierda radical y la demonización implacable de cuantos tuvieron algo que ver con la derecha”, sin embargo la impresión que yo tengo es la contraria.
Todavía hay políticas del PP que sacan a relucir a los bolcheviques - ¿algún joven sabe quiénes fueron ni qué hicieron? - en sus soflamas políticas y otros desacreditan a los partidos “comunistas” cuyo partido es tan legal como el PP que fundó un Ministro del general que dio un Golpe de Estado contra la Democracia Republicana; el mismo PP que no respeta la constitución porque al Gobierno le acaba de decir el TS que aprobar ventas de armamentos por la vía del Decreto Ley atropella la constitución.
A su autor “esta misma terminología de vencedores y perdedores era ya anacrónica en 1969 cuando, al declarar prescritos todos los delitos cometidos con anterioridad al 1 de abril de 1939, cualquiera que fuera su gravedad y sus consecuencias, se calificó a la guerra civil de “lucha entre hermanos”, porque olvida que la primera amnistía fue de los delitos cometidos sólo por los del bando vencedor mientras que los del bando democrático, que habían respetado la legalidad vigente - fueron condenados a muerte o a diversos años de prisión por “atentar contra el orden público.
Teniendo en cuenta que “quien olvida la historia está condenado a repetirla” no puede afirmarse que se decidió “dar por olvidado nada” con la Ley para la Reforma Política de 1976, porque allí lo que se hizo fue rechazar todo lo que oliera a golpe de Estado. La monarquía continuadora del régimen “nunca fue de todos” sino de él; del “muerto” y del “vivo”; el que para quedarse con la finca juró defender los Principios del Régimen golpista y se deshizo en elogios del genocida.
El “futuro de concordia en libertad y la Constitución de 1978 dio cobijo, por primera vez, a todos, al margen de antecedentes, de etiquetas históricas y de comportamientos políticos”, de lo que fue claro ejemplo el golpe del 23-F y la nula purga que hoy en el ejército, que seguía siendo franquista, contrariamente a lo que está haciendo Erdogan en Turquía. Mucho habrá que descubrir entre los “padrinos” de ese golpe pese a los muchos documentos y grabaciones destruidas ¿para proteger a quien? El blog de Anasagasti sobre Sabino Fernández Campos es muy esclarecedor.
El actual régimen, pese a lo que afirma su autor “no es plenamente democrático” porque está prohibido elegir al Jefe del Estado; tampoco en él se “respetan todas las ideas” que para eso se ha promulgado la Ley mordaza;  y tampoco se “limita la libertad de cada uno exclusivamente por el respeto a la libertad de los demás” porque la asimetría del ejercicio de esa libertad según quien sea el autor de las opiniones es cuestión que vemos todos los días en la prensa. Por otra parte nunca hubo un “sugestivo proyecto de vida en común” sino la opción menos mala ante el temor de otro golpe de Estado que triunfara. Y a la vista de la corrupción rampante en estos últimos 40 años donde están implicado desde las más altas personalidades del Estado hasta los concejales de pueblos pequeños, Calificarlo de “casi cuarenta años de progreso que la Historia reconocerá entre los más brillantes de nuestro recorrido por ella” revela la aprobación de la ruina de las clases medias y bajas.
Una exposición que enaltezca a “don Indalecio Prieto” no merece reproche del autor pero pretender  “borrar la heroica figura del general Moscardó” no le rebaja por su heroicidad sino por su deslealtad contra la República democrática que le pagaba todos los meses para que la protegiera del terrorismo golpista. Nadie que respete la historia, ¿lo hace el autor?, puede negar que “las Brigadas Internacionales fueron y son paradigma de la lucha por la democracia” y no se puede ocultar que “la División Azul es un símbolo hitleriano” sin que enviarlo al frente del Este reduzca ese apoyo al ejército nazi. Declarar “infausta ley de memoria histórica que, lejos de enterrar a los muertos como debemos y de sanar las heridas que puedan seguir abiertas, está provocando de nuevo las discordias y los enfrentamientos civiles” ignora que los provocan los herederos de los vencedores.
Que el régimen democrático no fuera idílico no justifica un golpe militar contra una república democrática que se dio porque la derecha había perdido las elecciones. Las amenazas de guerra civil para evitar  la revolución roja ¡que no ocurrió! no justifica dar un golpe de Estado tras dos años diciéndole a los campesinos “no queréis república, que os alimente la república”.
Sin duda contrariamente a lo que piensa su autor “la amnistía de los gravísimos delitos del 34, votada por las derechas “ contribuyó a la pacificación del bien público y a la tranquilidad de la vida nacional Dice el autor “no bastó la dramática apelación de Azaña a que no había venido a presidir una guerra civil, sino más bien con la intención de evitarla. El periódico de las izquierdas francesas advertía de que el Gobierno de Madrid estaba siendo desbordado por sus aliados de extrema izquierda, y estos parecían empeñados en darle la razón creando un clima rigurosamente inadmisible en el propio Congreso de los Diputados” pero eso se resuelve en el Congreso; no dando un golpe militar que llevaba meses y meses fraguándose ya antes de perder las elecciones.
Todos los dislates que se decían en el Congreso por Diputados de Derechas y de Izquierdas están mal por su desmesura pero están bien porque son palabras más o menos amenazantes pero dentro del juego democrático parlamentario en el que prima la libertad de expresión. Un golpe de Estado es otra cosa; es acabar con la democracia.
Que Dimítrov creyera “que el Frente Popular era una fase transitoria magnífica hacia la revolución comunista” tampoco justifica que Franco Mola y Varela, con Sanjurjo a la cabeza dieran un golpe de estado de base terrorista induciendo y protegía los asesinatos mientras que si en el ldo de la República  los había era porque el poder no pudo controlarlos hasta que lo consiguió.
Ochenta años después, no hay, por fortuna, comparación posible y a nadie se le ocurre que puedan reproducirse tan angustiosos acontecimientos”, dice el auto, pero por eso, recuperado un cierto grado de libertad debería como él dice llegar a un “acuerdo o en la civilizada discrepancia, las soluciones a los problemas de hoy, que son bastante más importantes que las medallas o el nombre de las calles” si no fuera porque  muchos los miles de españoles ven allí el nombre de los asesinos de sus padres o abuelos.

El ejemplo de Francia donde no hay ninguna calle dedica a Petain y sus secuaces nazis, de Alemania donde no hay ninguna dedicada a Hitler y sus secuaces nazis yo de Italia donde tampoco hay ninguna dedica a Mussolini y a sus secuaces fascistas es el ejemplo que nos da Europa y el que debería haber propuesto el autor de este trabajo en busca de la concordia.